jueves, 2 de enero de 2020

Un interesente reportaje sobre “Montaje, energía, trenes y pruebas, claves para acabar la alta velocidad”


Publica hoy el diario “EL Correo Gallego” un muy completo reportaje del periodista especialista en temas ferroviarios Alberto Martínez, que titula “Montaje, energía, trenes y pruebas, claves para acabar la alta velocidad”
Aborda temas de mucho interés y por ello recomiendo su lectura. Este es el enlace:
En el apartado titulado “Los anunciados Avril tardarán” cita las preguntas parlamentarias que sobre este tema hicimos los diputados ourensanos del PP; lo reproduzco:
 “Los nuevos trenes de alta velocidad de rodadura desplazable no estarán en servicio hasta bien entrado el segundo semestre de 2021. Renfe anunció que a inicios de ese año recibirá las primeras unidades, pero todas deberán pasar por un período de homologación no inferior a los nueve meses que precisó por ejemplo el tren híbrido S730 que se utiliza en el servicio Alvia de Galicia a Madrid.
Una respuesta más concreta a esta cuestión la deben recibir, en las próximas semanas, los diputados del PP en el Congreso por Ourense, Ana Vázquez y Celso Delgado, que presentaron a mediados de diciembre una batería de 26 preguntas sobre la línea gallega de alta velocidad, y en concreto sobre los trenes, pedían precisión sobre la fecha de entrega de las unidades Avril, la necesidad de incremento de los servicios en los fines de semana y si existe un plan para mejorar la oferta con vistas al Xacobeo 2021.
Pero centrándonos en los llamados trenes Avril, hay que recordar que, según los contratos adjudicados a Renfe por Talgo, los primeros 15 en ser entregados corresponden a los de ancho fijo estándar para las líneas Madrid-Barcelona e internacionales, y después serán los de rodadura desplazable, tanto los 13 (de un total de 19) reconvertidos de los actuales trenes hotel con caja estrecha (4 asientos por fila) que tienen 405 plazas, como los 15 nuevos de caja ancha (5 asientos por fila) de 523 plazas.
Finalmente las pruebas de homologación van a ser estrictas, lo que precisan muchos meses de trabajo tanto en la propia infraestructura como de laboratorio, con el big data que se extraerá de las diversas pasadas, escalonadas con bastantes semanas para analizar los registros, de las unidades técnicas ferroviarias tanto de calibración de las vías, como de la catenaria y las instalaciones de seguridad, señalización y comunicaciones.

Un proceso que empezará a vislumbrar sus meses finales cuando el tren auscultador Séneca, que puede circular a más de 300 km/hora, haga sus últimas pasadas, lo que aún está pendiente en el tramo Zamora a Pedralba, previsto para abrir en la primavera.
Pero no acabará con ello el período de pruebas. Quedarán por realizarse una serie de pasadas con un tren de pasajeros vacío durante varios días seguidos, sumando al menos unos 15.000 km. También resta el análisis de esos últimos datos que se recaben sobre la infraestructura y el período de formación de los maquinistas sobre la nueva línea para conocer todos los detalles de la misma.”