La Comisión Europea acaba de hacer públicas sus previsiones económicas de verano. Como es conocido la Comisión Europea publica cada año dos previsiones completas (primavera y otoño) y dos previsiones intermedias (invierno y verano).
Las previsiones intermedias
incluyen el PIB y la inflación anuales y trimestrales del año en curso y el año
siguiente correspondientes a todos los Estados miembros, así como los datos
agregados a escala de la UE y de la zona del euro.
Este es el comunicado de prensa de la
representación de la CE e España.
Dice así: "Tras un primer trimestre en el que la actividad económica superó las
expectativas y un segundo trimestre en el que la mejora de la situación sanitaria
aceleró la relajación de las restricciones de control de la pandemia, se prevé
una recuperación de la economía europea más rápida de lo esperado.
Un
crecimiento económico más rápido con la reapertura de las economías y la mejora
de los indicadores de confianza
Según las
previsiones económicas intermedias del verano de 2021, la economía de la UE y
de la zona del euro crecerá un 4,8 % este año y un 4,5 % en 2022. En
comparación con las previsiones anteriores de primavera, la tasa de crecimiento
para 2021 es significativamente superior en la UE (+ 0,6 puntos
porcentuales) y en la zona del euro (+ 0,5 puntos porcentuales), mientras
que para 2022 es ligeramente superior en ambas zonas (+ 0,1 puntos
porcentuales). Se prevé que el PIB real vuelva a su nivel anterior a la crisis
en el último trimestre de 2021, tanto en la UE como en la zona del euro. Para
la zona del euro, sería un trimestre antes de lo que anunciaban las previsiones
de primavera.
Se espera que
el crecimiento se fortalezca debido a varios factores. En primer lugar, la
actividad económica en el primer trimestre del año superó las expectativas. En
segundo lugar, una estrategia eficaz de contención del virus y los avances en
la vacunación provocaron una disminución del número de nuevos contagios y
hospitalizaciones, lo que, a su vez, permitió a los Estados miembros de la UE
reabrir sus economías durante el trimestre siguiente. Esta reapertura
benefició, en particular, a las empresas del sector de los servicios. Los
resultados optimistas de las encuestas a los consumidores y las empresas, así
como los datos de rastreo de la movilidad, indican que ya se está produciendo
una fuerte recuperación del consumo privado. Además, hay muestras de una
reactivación de la actividad turística dentro de la UE, que debería verse aún
más beneficiada por la entrada en vigor del nuevo certificado digital COVID de
la UE a partir del 1 de julio. Se espera que la combinación de estos factores
compense el impacto negativo de la escasez temporal de factores de producción y
del aumento de los costes que afectan a algunas partes del sector de la
industria de transformación.
Se prevé que
el consumo y la inversión privados sean los principales motores del
crecimiento, favorecidos por el empleo, cuya evolución debería ir en paralelo
con la actividad económica. El sólido crecimiento de las economías de los
principales socios comerciales de la UE debería beneficiar a las exportaciones
de bienes de la UE, mientras que las exportaciones de servicios experimentarán
dificultades debidas a las restricciones que siguen lastrando el turismo
internacional.
Se espera que el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) contribuya significativamente al crecimiento. La riqueza total generada por el MRR durante el período de previsiones puede ser aproximadamente del 1,2 % del PIB real de la UE en 2019. La magnitud prevista de su impulso al crecimiento se mantiene prácticamente invariable con respecto a las previsiones anteriores, ya que la información de los planes de recuperación y resiliencia presentados oficialmente en los últimos meses confirma, en líneas generales, la evaluación realizada en primavera.
Tasas
de inflación ligeramente superiores, pero moderadas en 2022
Las
previsiones de inflación para este año y el próximo también se han revisado al
alza. El aumento de los precios de la energía y de las materias primas, los
estrechamientos de producción debidos a las limitaciones de capacidad y la
escasez de algunos componentes de factores de producción y materias primas, así
como una fuerte demanda, tanto interna como externa, deberían ejercer presiones
al alza sobre los precios de consumo este año. En 2022, esas presiones deberían
moderarse progresivamente a medida que se levanten las limitaciones de
producción y converjan la oferta y la demanda.
Por
consiguiente, se prevé que la inflación en la UE alcance este año una media del
2,2 % (+ 0,3 puntos porcentuales en comparación con las previsiones
de primavera) y del 1,6 % en 2022 (+ 0,1 puntos porcentuales). En la
zona del euro, en cambio, se prevé que la inflación media sea del 1,9 % en
2021 (+ 0,2 puntos porcentuales) y del 1,4 % (+ 0,1 puntos porcentuales)
en 2022.
Riesgos
sustanciales
La
incertidumbre y los riesgos en torno a las perspectivas de crecimiento son
elevados pero, en conjunto, equilibrados.
Los riesgos
que plantea la aparición y la propagación de variantes del virus de la COVID-19
ponen de relieve la importancia de seguir acelerando el ritmo de las campañas
de vacunación. Los riesgos económicos están relacionados, en particular, con la
respuesta de los hogares y las empresas a los cambios en las restricciones.
La inflación
puede resultar más elevada de lo previsto si las limitaciones de la oferta son
más persistentes y las presiones sobre los precios repercuten en mayor medida sobre
los precios de consumo.
Declaraciones
de los miembros del Colegio de Comisarios:
Valdis Dombrovskis,
vicepresidente ejecutivo responsable de Una Economía al Servicio de las
Personas: «La economía europea se está recuperando con fuerza y todas las
piezas van encajando. La
reapertura de nuestras economías se ha producido antes de lo previsto gracias a
una estrategia eficaz de contención y al avance de la vacunación. El comercio
ha resistido bien, y los hogares y las empresas han demostrado también que han
sabido adaptarse a la vida en tiempos de COVID-19 mejor de lo esperado. Tras
muchos meses de restricciones, la confianza de los consumidores y el turismo
van en aumento, aunque la amenaza de nuevas variantes tendrá que gestionarse
cuidadosamente para que viajar sea seguro. Estas previsiones alentadoras se
deben también a las correctas elecciones políticas que se han tomado en el
momento adecuado y tienen en cuenta el considerable impulso que el Mecanismo de
Recuperación y Resiliencia aportará a nuestras economías en los próximos meses.
Tenemos que estar muy pendientes del aumento de la inflación, que se debe sobre
todo al incremento de la demanda interna y externa. Y, como siempre, tenemos
que ser conscientes de las disparidades: algunos Estados miembros verán que sus
resultados económicos vuelven a niveles anteriores a la crisis ya en el tercer
trimestre de 2021 —un verdadero éxito—, pero otros tendrán que esperar más. Las
políticas de apoyo deben continuar durante todo el tiempo que sea necesario y
los países deben evolucionar gradualmente a enfoques presupuestarios más
diferenciados. Mientras tanto, no debe disminuir el ritmo de
vacunación de los europeos para poder mantener a raya las variantes del virus».
Paolo Gentiloni, comisario
de Economía: «La economía de la UE debería registrar este año su
crecimiento más rápido de las últimas décadas, impulsado por una fuerte
demanda, tanto a nivel nacional como mundial, y una reapertura del sector de
los servicios más rápida de lo previsto desde la primavera. Gracias también a que las
restricciones de los primeros meses del año afectaron menos de lo esperado a la
actividad económica, estamos aumentando en 0,6 puntos porcentuales nuestras
previsiones de crecimiento para 2021. Se trata de la revisión al alza más elevada
que hemos hecho en más de diez años y está en consonancia con el nivel récord
de confianza que las empresas han alcanzado en los últimos meses. Con el
despegue del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, Europa dispone de una
oportunidad única para abrir un nuevo capítulo de crecimiento más fuerte, más
justo y más sostenible. Para llevar la recuperación por la vía correcta, es
esencial mantener las políticas de apoyo durante todo el tiempo que sea
necesario. Es fundamental multiplicar los esfuerzos de vacunación, siguiendo
con los impresionantes progresos alcanzados durante los últimos meses: la
propagación de la variante delta nos recuerda dolorosamente que todavía no
hemos salido de la sombra de la pandemia».
Contexto
Estas
previsiones se basan en una serie de hipótesis técnicas sobre los tipos de
cambio, los tipos de interés y los precios de los productos básicos elaboradas
hasta el 26 de junio. Por lo que respecta a los demás datos considerados,
incluidas las hipótesis sobre políticas públicas, estas previsiones tienen en
cuenta la información obtenida hasta el 28 de junio inclusive. Las hipótesis
parten del supuesto de que no se producirán cambios en las políticas, salvo que
se anuncien nuevas políticas de forma creíble y con detalle suficiente.
La Comisión
Europea publica cada año dos previsiones completas (primavera y otoño) y dos
previsiones intermedias (invierno y verano). Las previsiones intermedias
incluyen el PIB y la inflación anuales y trimestrales del año en curso y el año
siguiente correspondientes a todos los Estados miembros, así como los datos
agregados a escala de la UE y de la zona del euro.
Las próximas
previsiones económicas de la Comisión Europea serán las del otoño de 2021, cuya
publicación está prevista en noviembre de 2021.”