jueves, 16 de septiembre de 2021

Debate sobre el estado de la Unión Europea: lucha contra el COVID-19, recuperación, clima y política exterior

 

Ayer tuvo lugar en el Parlamento Europeo, reunido en Estrasburgo, el debate anual sobre el estado de la Unión Europea, en el que los eurodiputados discutieron los retos más urgentes de la UE con la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.


Esta es la nota de prensa que difundió el PE:


“Von der Leyen inició su segundo discurso sobre el Estado de la UE destacando que, en la mayor crisis sanitaria en un siglo, la crisis económica más profunda en décadas y la crisis planetaria más grave de la historia, «hemos optado por mantenernos unidos. Una sola Europa. Podemos sentirnos orgullosos». Destacó que Europa está en los puestos de cabeza en vacunación, y eso al tiempo que comparte su producción con el resto del mundo. Ahora la prioridad debe ser acelerar la vacunación global, mantener los esfuerzos en Europa y prepararse ante pandemias futuras.

Mirando al futuro, afirmó que la cuestión digital es crucial y anunció una nueva ley europea sobre chips, para alinear las capacidades europeas de investigación, diseño y ensayo y coordinar la inversión nacional y comunitaria en semiconductores. Sobre cambio climático, von der Leyen subrayó que, dado que «nosotros somos la causa, podemos hacer algo para atajarlo». El Pacto Verde coloca a la UE como la primera gran economía que ha presentado iniciativas amplias en este ámbito indicó, y prometió duplicar los fondos a países en desarrollo para biodiversidad, además de 4.000 millones adicionales para apoyarles en la transición verde de aquí a 2027.

Respecto a la política exterior y de seguridad, apostó por una estrategia de ciberseguridad y una nueva ley europea de ciberresiliencia. También anunció la organización de una cumbre sobre defensa durante la Presidencia francesa de la UE.

Manfred WEBER (PPE, Alemania) se refirió a las consecuencias sociales y económicas de la crisis del COVID-19 y declaró que Europa necesita crear empleo urgentemente, también en el sector sanitario, en el que lidera en el ámbito de las vacunas. Propuso negociar un programa de emergencia con Estados Unidos para los sectores del transporte y la movilidad y digital, así como medidas para reducir la burocracia. En su opinión, la defensa europea ha de reforzarse con una fuerza de reacción rápida y Europol ha de transformarse en un FBI europeo.

Iratxe GARCÍA (S&D, España) hizo un balance positivo de la respuesta contra la pandemia y sus consecuencias: «el 70% de la población está vacunada, la libertad de movimiento vuelve a ser una realidad y los fondos de recuperación ya están llegando». También avanza la transición hacia una economía verde, pero «no hemos hecho lo suficiente para asegurar el bienestar de los ciudadanos», advirtió, agregando que la crisis ha exacerbado las desigualdades y golpeado sobre todo a los más vulnerables.

Dacian CIOLOŞ (Renew, Rumanía) se quejó de que demasiado a menudo la Comisión se concentra en la diplomacia con el Consejo en vez de trabajar con el Parlamento en la legislación. Recordó que los valores son los que cimentan la Unión y pidió a la Comisión que comience a utilizar el mecanismo de protección del presupuesto -en vigor desde hace casi un año, pero todavía sin aplicar- para dejar de financiar las derivas iliberales en muchas partes de Europa donde la independencia judicial se ve socavada, los periodistas, asesinados y las minorías, discriminadas.

Philippe LAMBERTS (Verdes/EFA, Bélgica) consideró que hace falta más ambición climática: «más rápido, más alto, más fuerte: es el momento de aplicar el lema olímpico a nuestros esfuerzos por salvar el planeta». También pidió cambios en los sistemas fiscal y social para garantizar una vida decente a todos. Sobre la política exterior, apuntó que sólo cediendo soberanía podrá la UE convertirse en un «peso pesado» en la escena global, y reseñó que «una “Europa fortaleza” nunca será un actor respetado». Finalmente, lamentó que la principal preocupación en Europa sobre Afganistán es que ningún afgano ponga un pie en territorio europeo.

Los ciudadanos europeos no necesitan «discursos floridos», sólo quieren «que los dejen en paz», señaló Jörg MEUTHEN (ID, Alemania). Criticó los planes de la Comisión de «gasto masivo», para el Pacto Verde, el fondo de recuperación, el programa “Fit for 55”, que los ciudadanos al final tendrán que pagar. Advirtió de la creciente burocracia y deploró la transición hacia la energía verde, al preferir más energía nuclear.

Raffaele FITTO (ECR, Italia) dijo que los recursos de NextGenerationEU no son suficientes y pidió una reforma del Pacto de Estabilidad. También planteó un cambio de las reglas sobre ayudas de Estado y una política comercial más autónoma. «La transición medioambiental no puede abordarse sin tener en cuenta lo que sucede en el mundo y especialmente el impacto en nuestro sistema productivo». Sobre Polonia y el Estado de derecho, Fitto denunció «una imposición política por una mayoría que no respeta las competencias de los estados individuales».

Según Martin SCHIRDEWAN (La Izquierda, Alemania), Von der Leyen se ha autoelogiado, pero no ha ofrecido soluciones a los problemas de hoy. Pidió levantar la protección de las patentes y denunció que los diez mayores milmillonarios de Europa han visto aumentar sus fortunas durante la pandemia, mientras que uno de cada cinco niños en la UE está en riesgo de pobreza o ya la padece.”