Esta semana durante la clausura del XIII Congreso del PP de Melilla, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo garantizó que “trabajará” contra la pobreza en España y para mejorar la situación de la gente que lo está pasando mal, ya que nuestro país tiene a más del 28% de la población en riesgo de pobreza; ocupa el cuarto puesto por la cola en el índice de miseria de la UE; es líder en desempleo de la Unión, con el doble de paro que la media de nuestros socios; y ostenta la mayor deuda pública de la historia. Y dio estos titulares:
• Afirma que la “única línea estratégica” que une a Sánchez y sus socios es decirle a los ciudadanos que pongan más dinero. “Es verdad que discrepan en las formas, pero siempre están de acuerdo en lo mismo: pedirle a la gente más dinero y criticar a quienes proponemos que paguen menos por lo mismo”, dice.
• “Poner más dinero y gastarlo lo sabe hacer hasta el PSOE, pero para gestionar con menos dinero se necesita una política distinta”, recalca, al tiempo que advierte contra “el pufo” que el PSOE va a dejar a las futuras generaciones. “No creo que sea progresista vivir a cuenta de tus hijos”, repone.
• Reitera que “lo más urgente” para el Gobierno debe ser devolver el poder adquisitivo a los españoles deflactando el IRPF a las rentas medias y bajas o bajando el IVA de los productos básicos, que es lo contrario a seguir “exprimiendo” los bolsillos de los españoles. “Ahora nos vienen con la broma de que el PP quiere bajar los impuestos a los ricos. Una broma de mal gusto”, incide.
• “No pido más que nos devuelva a los españoles lo que hemos pagado de más por comprar lo mismo, si es que la inflación es la más alta de los últimos cuarenta años”, señala en alusión a su petición a Sánchez para que deflacte el IRPF, que viene reclamándole desde abril. “Si los precios han subido en todo, que nos devuelva al menos los impuestos que hemos pagado. Si no puede controlar los precios, por lo menos que controle los impuestos que pagamos cuando compramos lo mismo”, le demanda.
• Ante “la voracidad fiscal” del Gobierno, señala que no ha habido un presidente que haya cobrado más impuestos por lo mismo que Sánchez, con una recaudación récord de 22.000 millones más en lo que va de año a consecuencia de la espiral inflacionista Señala que “si queda alguien en el PSOE al que le duela la situación de España, debe decirlo claramente”. “Hay muchísimos socialistas que no están de acuerdo con el rumbo de su partido, muchos que lo dicen en privado y, ahora, aparecen socialistas que lo dice también en público. Y vendrán muchos más que no estén de acuerdo con Sánchez, aunque los insulten, marginen y los tachen de traidores al sanchismo”, asegura.
• Añade que, mientras el Gobierno da lecciones todos los días sobre la defensa de los intereses de la gente, vota “día sí y día también” a no bajarle los impuestos a las rentas medias y bajas, como ha sucedido recientemente en el Parlamento con la posición en contra de PSOE y Unidas Podemos a bajar el IRPF y el IVA de los alimentos. “Y aún encima aplaudieron”, denuncia.
• Lamenta que España tiene un Gobierno “débil, en el que las minorías mandan y las mayorías obedecen; caro, ineficiente y dividido permanentemente”. “Son dos equipos de fútbol que compiten entre sí”, apostilla.
• Resalta que “nuestro país no merece la política que tiene hoy”. “Nunca es un buen momento para tener un mal Gobierno, pero hoy tenemos el peor Gobierno en el peor momento posible”, resalta.
• Proclama que “España merece volver a una política de centralidad, estabilidad y mayorías amplias porque no puede permitirse más crispación ni división”, al tiempo que apela a superar “la política de insultos y degradación institucional porque desde el Gobierno no se puede insultar a nadie”.
• Acusa a Sánchez de haber abandonado los principios del PSOE, convirtiéndolo en un partido personalista, y advierte de que “no se puede insultar a la oposición por hacer su trabajo”. “Nosotros no insultaremos al Gobierno; contaremos lo que hace. Ya sé que al PSOE le interesa crispar, pero no a España”, remarca.
• Asegura que cada vez que las cosas van mal, los españoles llaman al PP para gobernar, porque saben que “tenemos un plan -presentado y explicado-, y que nos preocupamos porque a la gente le vaya bien”.
• Elogia la labor de Juan José Imbroda, decano de los presidentes autonómicos del PP y compañero suyo de bancada en el Senado, quien “ha dedicado su vida a la política, a Melilla y a España y que vuelve a ponerse ahora a disposición de los ciudadanos”. “Hay muy pocas personas en España que puedan acreditar su currículum”, destaca.
• Remarca que del XIII Congreso del PP de Melilla, el partido sale “más abierto, más fuerte y mejor, con un líder reforzado y un equipo renovado”, con el afán de retornar a la política útil y devolver a la Ciudad Autónoma el Gobierno que merece.