En nombre del Grupo defendió la moción la diputada sevillana, Sol Cruz-Guzmán García.
Este fue su discurso:
“ Señorías, debatimos hoy esta necesaria moción consecuencia de interpelación urgente de mi grupo, que tiene como objetivo reforzar el compromiso con el ferrocarril, vertebrador del territorio y herramienta de cohesión social, exceptuando en aquellos territorios que adolecen de dicha infraestructura; el medio de transporte más sostenible y más seguro que todos los grupos que conformamos esta Cámara alguna vez hemos defendido.
Exponíamos en nuestra interpelación el abandono de la red ferroviaria y ahora pedimos el apoyo a medidas específicas, porque, señorías, el problema que tiene Sánchez es que ha pasado de crear un eslogan para su Gobierno a convertir su Gobierno en un mero eslogan, solo eso. Del «no dejar a nadie atrás» —que se lo cuenten a las familias españolas— al «sí es sí», lema que ha quedado exclusivamente para encabezar la manifestación de delincuentes que salen de prisión antes de tiempo y atemorizan a las víctimas de agresiones sexuales. Hoy mismo hemos visto la rebaja de la pena del caso Arandina en La Rioja; no puedo imaginar el dolor de esas madres ni de esas jóvenes. Mucha publicidad y poca realidad, mucho marketing y poca gestión es lo que ofrece Sánchez y desespera a los españoles.
Nos increpaba la ministra Sánchez diciendo que no entendía cómo nos atreveríamos a quejarnos ante esta situación; que somos poco patriotas, nos decía. Y es justo lo contrario: queremos que España vaya bien. Se apoyaba la ministra para su crítica en los buenos datos de encuestas europeas con relación al ferrocarril. No sé si habrá intervenido la cocina del señor Tezanos, pero la animo a que pise la calle, a que se asome a las verdaderas encuestas en España y a que le eche un ojo a la prensa diaria de nuestro país.
La Voz de Galicia: quejas de usuarios porque las demoras en Ourense son sistemáticas. (Muestra un recorte de prensa). El Español: viajeros del AVE Madrid-Málaga que se quedaron más de tres horas tirados. (Muestra otro recorte de prensa). La Tribuna de Ciudad Real, que señalaba que durante octubre han tenido la semana del caos en los Avant. (Muestra otro recorte de prensa). Y —¡cómo no!— el tren de Extremadura, que ha provocado nuevos retrasos, dos horas en el Alvia en la conexión Badajoz-Madrid; y era la tercera vez en la misma semana en el mes de octubre. Ayer mismo, nuestro alcalde de Algeciras, Landaluce, denunciaba un nuevo retraso entre Madrid y Algeciras; eso sí, dice que solamente ha sido media hora de retraso, de forma irónica, por supuesto.
Además de estos inconvenientes, encontramos que las frecuencias pre-COVID siguen sin recuperarse. ¿Dónde está la línea AVE Zaragoza-Madrid de las siete de la mañana? ¿O el prometido aumento de frecuencias entre Alicante y la capital? Nada de nada. ¿Quién falta a la verdad? ¿El Gobierno, que asegura que las frecuencias están al cien por cien, o los periodistas que denuncian esta falta de servicio?
Señor y señora Sánchez, si no creen a los periodistas, a esos que censuran y estigmatizan diciendo que son de derechas o de izquierdas, buceen en las redes sociales. En Twitter solamente tiene que poner: quejas de Renfe. Y pueden leer a Carolina Alonso de Podemos, que dice que Renfe ha colapsado la Comunidad de Madrid. (Muestra un tuit). O pueden ver los trenes de media distancia de Galicia, que tienen cientos de vídeos con aglomeraciones y embudos. Y, si no, disfruten del ingenio y creatividad de nuestro país con otro tuitero que nos dice: Todos mis videos virales son de Renfe. (Muestra un tuit). Debe ser el único tema que une a todos los españoles.
Este es el resumen: cientos de usuarios denunciando la situación, trenes de cercanías y media distancia con retrasos y averías, colas kilométricas y falta de personal. Los trabajadores son los que sufren en primera persona la dejadez del Gobierno en la inversión y planificación de nuestro sistema ferroviario. Hablen también con ellos y que les digan cómo se sienten, porque ellos son los que tienen que dar la cara por su incompetencia.
Destaco, por ejemplo, las agresiones sufridas hace unos días por los maquinistas en Cataluña ante una gran falta de seguridad. Precisamente por esa falta de maquinistas es por lo que no se han puesto en funcionamiento el cien por cien de las frecuencias. Es ahora, después de cuatro años de legislatura, cuando convocan cuatrocientas plazas de maquinistas. Vamos a ver, ¿dónde está la planificación de los recursos humanos de Renfe?
Los maquinistas tienen que pasar por un espacio de mentorización con aquellos que tienen más experiencia, porque está en juego la seguridad de muchos viajeros. Pedimos, por eso, que se cumpla el plan de empleo de Renfe, con sentido común —aunque es el sentido menos común que tiene este Gobierno— y con transparencia en el sistema de selección, porque ya han invalidado alguna convocatoria por falta de seguridad jurídica y de transparencia.
Pero si tenemos que poner un ejemplo del caos en la gestión fruto de las medidas improvisadas, sin análisis y sin escuchar ni a los expertos —que les aseguro que existen— ni a sus propios técnicos, es sin duda alguna su deriva del «todo es gratis para todos» también en el tren; medidas a las que Europa está diciendo que no y a las que no está dando su visto bueno.
Su regalo está provocando el colapso de muchas líneas, mientras que se quedan los vagones vacíos ante la desesperación de los usuarios. Su objetivo ha sido la búsqueda de votos y lo que están encontrando es un enfado generalizado, porque a muchos el regalo les está saliendo muy caro al tener que buscar otro medio de transporte o pagar su billete sin descuentos si consiguen subirse al tren sin billete. Ahora dicen que van a poner remedio tras meses de caos; veremos cómo lo hacen. Era tan sencillo como haber ayudado a quienes más lo necesitaban, a los trabajadores y estudiantes, rebajándoles el bono.
Además, pedimos que revisen las tarifas, esas que poco a poco, con nocturnidad y alevosía, van subiendo extra a extra, haciendo caja y poniendo al consumidor las cosas cada vez más difíciles, utilizando hasta pop-ups en su web a ver si pica algún incauto. Por cierto, una web y una aplicación que falla más que el tren de Extremadura.
Este carísimo obsequio ha costado a los españoles 660 millones de euros que podrían haber supuesto un impulso a los retrasados corredores ferroviarios, que mejorarán nuestra economía y que traerán el mejor regalo que podemos ofrecer: la disminución del desempleo y trabajos dignos que permitan libertad plena a los españoles para viajar donde y cuando quieran.
Señor Sánchez, le aseguro que no pasará a la historia por sus exhumaciones, sino como el gobernante que exhibió la peor historia de nuestro país, el que hizo tambalear a las instituciones, el que enturbió la separación de poderes y el que dejó desmantelado el sistema ferroviario. Su deuda no nos permitirá olvidar en décadas su nefasta gestión al frente de España.”
https://www.congreso.es/public_oficiales/L14/CONG/DS/PL/DSCD-14-PL-227.PDF