jueves, 16 de marzo de 2023

La presidenta de la AEB asegura que “no hay riesgo de contagio” de Credit Suisse a la banca española, que es “sólida”

 

Asisto a primera hora de esta mañana al acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid en el que intervino la presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán.

La presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, aseguró “rotundamente” este jueves en el Fórum Europa que “no hay riesgo de contagio a la banca española” de las dificultades de Credit Suisse.

Fue preguntada por la situación de la banca española respecto a los problemas que se han mostrado en Credit Suisse, que va a recibir financiación del Banco Nacional Suizo ante sus debilidades en las cuentas, y tras la volatilidad que se está produciendo en los mercados a raíz de la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank.
 
“Rotundamente no hay riesgo de contagio a la banca española”, afirmó Kindelán. Explicó que, de una parte, Credit Suisse es una entidad con problemas desde hace tiempo y, de otra, SVB “no tiene nada que ver” con la banca española porque “apenas da crédito” y está enfocado en ‘startups’.
 
Insistió en que no se puede hacer “ningún tipo de paralelismo” con los bancos españoles y destacó que el marco regulatorio en Europa se ha “reforzado” en la crisis financiera anterior. “En España tenemos unos bancos diversificados, sólidos” que han resuelto “muy bien” años “muy difíciles”, reafirmó.
 
La presidenta de la AEB resaltó que la calidad en la gestión de riesgos de la banca española es “excepcional”, que las entidades son “rentables” y eso es “una gran noticia” pese a que “se critica”.
 
Kindelán consideró que está habiendo “mucho nerviosismo” en Bolsa por una “crisis global de desconfianza” y que los mercados en este momento “no están discriminando” entre entidades. En este punto, reforzó la idea de que “los fundamentales de nuestra banca son sólidos”.
 
Preguntada sobre la decisión que tomará hoy el Banco Central Europeo (BCE), que reúne a su Consejo de Gobierno para abordar una nueva subida de los tipos de interés aunque con un contexto económico muy diferente al de la anterior reunión marcado por la volatilidad en los mercados, Kindelán señaló que, “con el manual en la mano”, dado que la inflación sigue elevada, “entendería que los tipos van a seguir subiendo”.

Sobre si se evitarán nuevas crisis, la presidenta de la AEB resaltó que en la coyuntura anterior se logró “un cambio de paradigma”, se lanzó el proyecto de unión bancaria europea que aún está incompleta pero que da “un marco de certidumbre”. Indicó que este proyecto ya cuenta con un supervisor único y un mecanismo de resolución de crisis único y lo que queda pendiente es el fondo de garantía de depósitos. Por ello, instó a completar la unión bancaria y se congratuló de que el Gobierno se lo haya marcado como prioridad durante la presidencia española del Consejo de la UE en el segundo semestre de este año. “Tener unión bancaria daría una señal muy clara de que en Europa tenemos una banca integrada, fuerte”, subrayó.

Kindelán, indicó que se han recibido unas 15.000 solicitudes de adhesión a los códigos de buenas prácticas para hipotecados vulnerables o en riesgo de serlo, de las que se están tramitando 9.000, y cada mes se están registrando más.

Reclamó que el entorno regulatorio sea “estable” y que el tono del Gobierno con el sector financiero sea “de colaboración”.

La presidenta de la AEB criticó que nuevo gravamen, con el que el Gobierno pretende recaudar unos 1.500 millones este año y el que viene, se presentó en un discurso del Estado de la Nación y se tramitó sin un procedimiento de consulta, además de esgrimirse como argumentos para aplicarlo los beneficios extraordinarios para la banca con la subida de los tipos de interés. “Lo excepcional son diez años de tipos negativos” y el rescate a las cajas de ahorros politizadas, respondió Kindelán.
 
“Las entidades hoy, lejos de haber sido rescatadas, han puesto una parte muy importante” para las cajas, insistió, y rechazó el impuesto que consideró basado en “falacias”.
 
La presidenta de la AEB puso en valor la función social “crítica” de la banca para la economía y destacó que el 51% de sus beneficios se destinan a impuestos, porcentaje que se eleva en diez puntos si se tiene en cuenta el gravamen temporal. “Nuestros impuestos van a apoyar el estado del Bienestar, van a ayudar a salud, a sanidad, a educación”, quiso destacar, y enfatizó la importancia de que la banca sea rentable para ello.
 
Otro asunto del que también manifestó que no “gusta” al sector es la creación de la Autoridad Independiente de Defensa del Cliente Financiero, que se financiará con una tasa de 250 euros soportada por las entidades por cada reclamación recibida.
 

Al respecto, aplaudió que el Gobierno admita la posibilidad de revisar esa tasa. Kindelán explicó que es “un incentivo” a reclamar porque se debe pagar independientemente del sentido final de la reclamación. También consideró que, al ser un nuevo organismo, en lugar de mejorar los que había, es una “complicación, por no hablar del coste, que va a ser elevado”.
 
En esta línea, manifestó el temor a que suceda como en Reino Unido, donde se creó una autoridad parecida que ha multiplicado el número de empleados y de reclamaciones. Otro inconveniente que apuntó es la diferencia de criterio que puede haber entre lo que decida la nueva autoridad y lo que se dirima en los tribunales, dado que se puede acudir a ellos también.
 
Por otra parte, sobre las medidas de refuerzo en la banca para atender a los mayores, la presidenta de la AEB valoró que “en pocas semanas” las entidades tomaron medidas como la ampliación del horario de caja y que siguen trabajando en mejorar la atención, tras el protocolo reforzado firmado con el Gobierno. También recordó que las cartillas para mayores de 65 años se mantendrán, ante el temor entre el colectivo, y en el ámbito rural han aumentado la atención presencial.
 
En otro tema en el que dijo que ya están trabajando con el Ejecutivo es en adenda al plan de recuperación para canalizar 94.000 millones de euros adicionales de fondos europeos.