Asisto hoy a la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez en el Congreso para informar del balance de la Presidencia española del Consejo de la UE y de las conclusiones de los consejos europeos de junio, octubre y diciembre, y para dar cuenta del Consejo Europeo extraordinario convocado el 17 de octubre tras el ataque terrorista de Hamás contra diversas ciudades israelíes, y de las conclusiones del Consejo Europeo celebrado en Bruselas en junio y octubre.
En su turno, Alberto Núñez Feijóo fija las condiciones para reunirse con Sánchez: sin mediador, en el Congreso, el viernes, sin imposiciones y con orden del día oficial.
• El presidente del PP subraya que no pide amnistías a Sánchez, ni votos para incluir asesinos en sus listas, ni referéndum de autodeterminación y asegura que no le va a consentir que mientras se humilla ante sus socios, falte al respeto al primer partido de España.
• Considera que es “extremadamente difícil” hablar con Sánchez, porque no respeta al adversario, intenta engañar siempre a todo el mundo y es sumiso con quien quiere debilitar al Estado e implacable con los que lo defienden.
• Califica de “vergüenza nacional, bochorno internacional e indecencia moral” entregar la Alcaldía de Pamplona a Bildu, dentro del “pacto encapuchado que ocultó para ser investido presidente”
• Cuestiona a Sánchez si Bildu se ha comprometido con él en respetar la Constitución, condenar los atentados terroristas, a no incluir a condenados en sus listas, a no homenajearlos cuando salen de la cárcel o a colaborar en el esclarecimiento de los crímenes.
• Define como “decepcionante” la Presidencia de turno de la UE, sin consenso ni conocimiento de la Cámara, reventada con una campaña electoral y con mayor preocupación por la amnistía que por los objetivos planteados.
• Ejemplifica su falta de liderazgo con la incapacidad de haber dado el impulso definitivo al Tratado con Mercosur y critica los “giros vertiginosos en el ámbito energético”, subrayando que España sigue pagando un 15% por la electricidad que el resto de países de la UE.
• Desmonta su política exterior al reprochar sus actuaciones respecto a Ucrania, por ser el único mandatario europeo que no ha llevado al Congreso el envío de ayuda militar o por las contradicciones de sus socios en apoyo a ese país.
• Considera “lamentable” que su política internacional sea tan poco fiable que haya servido para financiar indirectamente la guerra de Putin, ya que su “giro en el Sáhara por sus problemas con Argelia” hace que España se consolide como el mayor comprador de gas ruso de toda la UE.
• Afirma que el mayor reconocimiento internacional que ha recibido en estos meses ha sido el del grupo terrorista Hamás, “otra compañía estupenda para construir su muro”, lamenta.
• Incide en que la UE ya empieza a conocer al verdadero Sánchez tras su discurso en Estrasburgo, donde mintió y dijo que los jueces y fiscales de España prevarican, y donde fue desmentido por la Comisión Europea.
• Reitera que España preocupa en Europa por la degradación del Estado de derecho, por despenalizar la corrupción y el terrorismo y ser una de las naciones en las que se retrocede en derechos: “Es usted el mayor agente de descrédito del país”
• Subraya que el de Sánchez es una “inmensa anomalía de Gobierno” en la UE: “Fundado en un acto de corrupción política, humillado en Suiza y cada día en esta cámara”.
• Demuestra que la presidencia de turno ha sido la más cara de cuantas ha tenido España, la menos consensuada con las Cortes y a que menos avances de calado ha tenido, sin resolver ningún tema relevante: “Ni liderazgo en Europa ni en América Latina”.
• “En su afán de llegar a lo más alto, no se puede caer más bajo”, asevera Feijóo, quien dice que le gusta homologarse a Europa y todos sus socios quieren abandonar España.