Ayer publicaba en este Blog una entrada haciendo mi valoración sobre la decisión del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de aprobar provisionalmente el proyecto de construcción del segundo tramo de la variante de Ourense:
“Autovía A-56, Lugo – Ourense. Variante de Ourense. Tramo: Enlace de Quintela con la N-120 en su PK aprox 572+000 – Enlace de Casilla con la N-525 en su PK 241+200”.
http://www.celsodelgado.gal/2023/12/difunde-hoy-el-ministerio-de.html
Los medios de comunicación se hacen eco de mi valoración al respecto de este anuncio:
Dice así: “El Ministerio
de Transportes y Movilidad Sostenible aprobó provisionalmente el proyecto de
construcción del segundo tramo de la circunvalación norte. Se trata del
segmento entre Quintela y el enlace de Casilla, que comunicará la N-120 y las
N-525 a través de dos túneles -uno por sentido- en Eiroás. La longitud del
tramo alcanza los 3,1 kilómetros.
El presupuesto base de
licitación asciende a 164,07 millones de euros, IVA incluido. El presupuesto de
ejecución material (el coste de las obras en sí mismas) supone 113,95 millones,
de los que los túneles de Eiroás se comerán más de la mitad. Su construcción
requerirá 65,11 millones. Tendrán tres carriles por sentido y una longitud de
unos 850 metros. A este paso subterráneo se suman dos falsos túneles en ambos extremos,
una pérgola para el ferrocarril y tres pasos superiores.
De construirse este tramo,
quedarían unidas la N-120 en la salida hacia Vigo y el viaducto de Velle,
permitiendo acceder a la N-120 en dirección Monforte. Esto aliviaría el tráfico
del centro de la ciudad, en especial en la avenida Ribeira Sacra, la actual vía
de comunicación entre ambos puntos. En todo caso, aún queda papeleo, ya que
solo se trata de la aprobación provisional.
El candidato socialista a la
Xunta, José Ramón Gómez Besteiro,
abrazó la noticia y reivindicó que lleva “o selo dos socialistas”. Mientras
tanto acusó a la administración autonómica actual de poner problemas “ós que traemos investimentos a
Galicia”.
OBRAS
INEXISTENTES
El tramo forma parte de la
autovía A-56 entre Ourense y Lugo, de la que solo se ha construido el segmento
San Martiño-A Barrela. El resto de tramos están estancados en la redacción del
proyecto o, directamente, paralizados en los cajones ministeriales.
Solo uno está,
teóricamente, en obras: el otro tramo de la circunvalación norte,
Eirasvedras-Quintela, que enlaza el proyecto aprobado hoy con el acceso norte
de la A-52. En septiembre de 2022, la entonces secretaria de Estado de
Infraestructuras, Isabel Pardo de Vera, colocó la primera piedra de este primer
tramo de la circunvalación. Sin embargo, los trabajos apenas han avanzado y ni siquiera
son visibles sobre el terreno. Las obras deberían concluir en 2025, pero están
congeladas.
Celso
Delgado, diputado popular en el Congreso, dijo que la
aprobación del segundo tramo le produce “satisfacción”, aunque recordó que “en
2019, el Gobierno había manifestado que este trámite estaba muy avanzado”. Por
ello, afea que se dé a conocer “en vísperas de unas elecciones”.
Delgado también clamó
contra la parálisis del primer tramo: “Las obras están absolutamente paradas.
No se ha movido un solo metro cúbico, no hay ninguna estructura, no hay caseta
de obras...”.
El Gobierno justificó los
retrasos en el Congreso argumentando que “se está tramitando el desvío de todos
los servicios afectados al tratarse de una obra en medio urbano”. Aún no se
observan movimientos y no hay rastro de los desmontes y viaductos de la
autovía.”
Dice así:
“El Ministerio de
Transportes y Movilidad Sostenible ha aprobado provisionalmente el proyecto de
construcción del segundo tramo de la variante de Ourense de la autovía A-56 a
Lugo. Este nuevo tramo enlazará el cruce de Quintela con la N-120 hasta la
intersección de A Casilla con la Nacional 525, un tramo vial con una longitud
de algo más de 3 kilómetros y un presupuesto base de licitación de 164.071.522
euros. El proyecto, según el ministerio, debe de ser sometido “próximamente” a
información pública e informes técnicos de organismos y titulares de servicios
afectados, y para ello será publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El tramo objeto de la actuación se encuentra enmarcado en Ourense.
El diputado del PP en el
Congreso Celso Delgado advertía ayer
que aunque les produce “satisfacción” que se hable ya de la aprobación
provisional de este proyecto tan demandado, ya en 2019 el Gobierno central
había anunciado “que estaba todo muy adelantado, que solo estaba pendiente de
una auditoría de seguridad viaria y que se aprobaría este trámite rápido”,
recuerda.
Son “cuatro años de
retraso”, indica el diputado, que ve “indignante que digan que el primer tramo
de la variante norte está en obras, cuando lo cierto es que el primer tramo
entre Eirasvedras y Quintela lleva 15 meses parado, desde que se puso el primer
hito y allí no hay ni materiales ni caseta de obra”, indica Celso Delgado.
Incluso “reconocieron a nuestra pregunta, que solo habían invertido el 8% de
los 2 millones de euros presupuestados para e ese primer tramo
Eirasvedras-Quintela durante 2022”, advierte el diputado popular.
Segundo
tramo de la variante
En todo caso la finalidad
de este nuevo tramo Quintela-A Casilla, aprobado provisionalmente, incluido en
la futura autovía A-56 Lugo-Ourense, tendrá una vía de dos calzadas separadas
con dos carriles por sentido. La longitud de la actuación es de 3,1,
kilómetros, con carriles de algo más de 3 metros de anchura, salvo en sección
de túneles, donde habrá tres carriles de 3,5 metros de ancho. El tramo cuenta
con el túnel en Eiroás, con una longitud de cerca de 900 metros y dos falsos
túneles en sus extremos.
Besteiro
elogia el sello “socialista” de estas obras y el PP su carácter “electoralista”
El diputado por Lugo y
presidente de la Comisión de Transportes, José
Ramón Gómez Besteiro, reivindicó el “sello socialista” que llevan dos
novedades con respecto a la movilidad de Ourense y que tienen que ver con el
anuncio de la aprobación provisional del segundo tramo de la variante de
Ourense y la publicación en el BOE de la licitación de la rehabilitación del
edificio de la estación de tren de San Francisco en la capital de As Burgas.
Además, sentenció que,
mientras tanto, “Rueda pone problemas a los que traemos inversiones a Galicia”,
sentenció el que es además candidato del PSOE a la Xunta.
Por su parte, el diputado
del PP Celso Delgado solo ve el
sello “electoralista” en el momento elegido para anunciar el trámite de estas
obras, que es solo una “aprobación provisional de un proyecto que lleva mucho
retraso”.
Dice así: “El Ministerio
de Transportes informó este jueves de la aprobación provisional del segundo
tramo de la variante norte, entre Quintela y A Casilla, donde el vial conectará
con la carretera Nacional 525. El primero, entre Eirasvedras y Quintela está
formalmente en obras desde el año 2022, aunque con escasos avances. Con
respecto a la aprobación anunciada ayer, del tramo Quintela-A Casilla, que
tendrá un recorrido de 3,1 kilómetros, el presupuesto estimado es de 164
millones de euros.
El candidato del PSdeG a
la Xunta, José Ramón Gómez Besteiro,
celebró este avance y también la licitación de las obras del centro de
regulación del tráfico ferroviario en San Francisco. Celso Delgado, del PP, censuró por su parte el «monumental retraso»
del tramo provisionalmente aprobado ayer en la variante norte y recordó la
parálisis del de Eirasvedras-Quintela. Además, la formación popular criticó la
demora en las obras prometidas en los pasos de Ramón Puga y Tarascón."